jueves, 3 de abril de 2014

"ESPERANDO" (Cuento)



                                       Cuento de Osamu Dazai (1909-1948)
                                        (Traducciòn y nota de Pablo Figueroa)


     (  A continuaciòn les presento, un cuento de un escritor japonès que leì en un  blog del  poeta, escritor y fotògrafo: Aurelio Asiain. Espero que les agrade al igual que a mi. Su blog: http://www.aurelioasiain.blogspot.com/.  Este escritor es originario del D.F. (Mèxico) pero reside en Japòn. Ha realizado traducciones de poetas clàsicos japoneses, asì como tambièn es un excelente fotògrafo. Estoy seguro que si visitan su blog terminaran sorprendidos por sus poemas y traducciones y, sin duda, por sus fotografìas.)

                                                          "ESPERANDO"
Todos los días voy a la pequeña estación de tren a buscar a alguien. Quién es ese alguien, no lo sé.
Siempre paso por ahí después de hacer las compras en el mercado. Me siento en una fría banca, pongo la cesta de las compras sobre mis rodillas, y miro abstraídamente hacia los molinetes. Cada vez que llega un tren, una multitud de pasajeros es escupida hacia afuera desde las puertas de los vagones. La muchedumbre avanza en tropel hacia los molinetes, y las personas, todas con la misma cara de enojo, sacan los pases y entregan los boletos. Luego, sin mirar hacia los costados, caminan precipitadamente. Pasan por delante de mi banca, salen hacia la plaza que está frente a la estación, y se van cada uno por su lado. Yo sigo sentada distraídamente. ¿Qué sucedería si alguien sonriese y me hablase? ¡Ay no, por Dios! La mera posibilidad me pone tan nerviosa que me estremezco de sólo pensarlo, como si me hubieran echado agua fría en la espalda. No puedo respirar. Y sin embargo, continúo esperando a alguien todos los días. ¿A quién podría ser que estuviera esperando? ¿A qué tipo de persona? Pero quizás lo que estoy esperando no sea un ser humano. Odio a los seres humanos. En realidad les tengo miedo. Cada vez que estoy cara a cara con alguien diciendo cosas como “¿qué tal, cómo está?”, o “¡cómo refrescó!”, saludando sólo para cumplir, siento que soy la persona más falsa del mundo. Me pone tan terriblemente mal que quiero morirme. Y las personas con las que hablo se ponen a la defensiva sin razón, me hacen vagos cumplidos, y comentan sentenciosamente impresiones que no tienen en verdad. Su cautela mezquina me hace sentir triste: el mundo es cada vez más repugnante y no puedo soportarlo. La gente intercambia tensos saludos desconfiando unos de otros hasta cansarse, y así pasa la vida.
A mí no me gusta encontrarme con gente. Por eso, a no ser que hubiera una razón excepcional, nunca visitaba a amigos. Lo más cómodo ha sido para mí estar en casa con mi madre cosiendo, las dos solas, en silencio. Pero finalmente estalló la guerra[1], y el ambiente se puso tan tenso, que empecé a sentirme culpable de quedarme en casa todo el día sin hacer nada. Me sentía angustiada y no podía relajarme en absoluto. Quería hacer una contribución directa trabajando tan duro como pudiese. Perdí toda fe en la vida que había llevado hasta ese momento.
No soporto quedarme en casa en silencio. Sin embargo cuando salgo me doy cuenta de que no tengo ningún lugar adonde ir. Así que hago las compras, y al regresar, paso por la estación y me siento distraídamente en la fría banca. Tengo la ilusión de que alguien venga, pero si esa persona realmente apareciera, ¿qué haría? La idea me da pánico, pero estoy resignada. Si eso sucede, voy a entregarle mi vida: estoy preparada y ese momento marcará mi destino. Estos sentimientos de resignación y fantasías impudentes se entretejen de una forma muy extraña. La sensación me agobia de un modo sofocante. El mundo alrededor se enmudece; la gente que va y viene en la estación aparece pequeña y lejana, como si estuviera mirando por un telescopio al revés. La sensación es vaga, como si estuviera soñando despierta, como si no supiera si estoy viva o muerta. ¡Ay! ¿Qué cosa estoy esperando? Acaso yo no sea más que una mujer obscena. Todo eso del estallido de la guerra, lo de sentirme angustiada, de trabajar duro porque quiero ser útil, quizás sólo sea una mentira, una excusa noble para tratar de encontrar una oportunidad de materializar mis fantasías indiscretas. Me siento aquí con mirada perdida, pero en el fondo, dentro de mí puedo ver cómo flamea la llama de mis deseos obscenos.
¿Pero, a quién diablos espero? No tengo en absoluto una idea clara, solamente una imagen vaga y confusa. Y sin embargo, continúo esperando. Desde el estallido de la guerra paso por aquí todos los días a la vuelta de las compras y me siento en esta fría banca a esperar. ¿Y si alguien me sonriera y me hablara? ¡Ay, no!, no es usted a quien estoy esperando. Entonces, ¿a quién? ¿Qué espero? ¿Un marido? No. ¿Un novio? No, para nada. ¿Un amigo? De ningún modo. ¿Dinero? Es ridículo. ¿Un fantasma? ¡Ay no, por favor!
Algo más apacible y alegre, algo maravilloso. No sé qué. Por ejemplo, algo como la primavera. No, no es eso. Hojas verdes. El mes de Mayo. El agua fresca y cristalina fluyendo a través de los campos de trigo. No, tampoco es eso. Ay, y sin embargo sigo esperando, con el corazón palpitante. Las personas pasan unas tras otras delante de mis ojos. No es aquello, ni esto. Con la cesta de compras en mis brazos, me estremezco y espero con todo mi corazón. Le pido a usted por favor que no me olvide. Por favor no olvide a la chica veinteañera que viene todos los días a la estación y regresa a su casa sintiéndose vacía. Por favor recuérdeme, y no se ría de mí. No voy a decirle el nombre de la estación. Aunque no lo haga, usted me verá algún día.


En 1948, cuando Osamu Dazai se encontraba en la cúspide de su carrera literaria, decidió quitarse la vida junto con su amante, una joven viuda con quien había sellado un pacto de amor suicida. Para ello la pareja eligió un pintoresco canal del río Tama en el apacible suburbio de Mitaka en Tokio. En esa época del año las frecuentes y turbulentas lluvias del monzón hacían que los niveles de agua en los canales subieran considerablemente. Los cuerpos fueron encontrados en un recodo del rio unos días más tarde, justo cuando Dazai hubiera cumplido treinta y nueve años.
La idea de quitarse vida no era en absoluto nueva para el escritor: lo había intentado sin éxito en variadas ocasiones. Profundos traumas personales, una fuerte dependencia del alcohol, y desórdenes psíquicos que fueron empeorando a lo largo del tiempo, hicieron que el deseo de muerte ocupara un lugar preponderante en los pensamientos de Dazai. Esta obsesión con el suicidio se fusiona en su ficción literaria con un agudo e irónico sentido de crítica a la sociedad, otorgándole un carácter inseparable de lo autobiográfico.
Nacido con el nombre de Shuji Tsushima en 1909 en una pequeña ciudad de Aomori en el norte de Japón, Dazai fue el décimo de once hermanos de una familia acomodada. Su padre se encontraba a menudo fuera de la casa y su madre sufría problemas de salud crónicos, con lo cual el niño fue criado por tías y sirvientes. Su afición por las letras comenzó desde pequeño y en 1930 decidió ingresar al departamento de Literatura Francesa de la Universidad Imperial de Tokio.
Su paso inconcluso por la academia estuvo permeado del tumultuoso estado de cosas de la época y de sí mismo. Dazai se sintió fuertemente atraído por los ideales del marxismo y por el incipiente Partido Comunista de Japón, y a menudo manifestó su sentido de culpa por “haber nacido en la clase social equivocada”. Durante esta etapa temprana escribió una cantidad de cuentos cortos, y la experiencia adquirida a través del paradigma comunista se haría patente a lo largo de su carrera.
Un posterior período de relativa calma llegaría cuando Dazai contrajo matrimonio con Machiko Ishihara en 1939. Fue durante estos años que escribió dos novelas enormemente exitosas tituladas El Ocaso(Shayo, 1947) e Indigno de ser humano (Ningen Shikkaku, 1948). Ambas obras expresan el profundo pesimismo del autor y su visión decadente del ser humano; las hondas heridas de una sociedad golpeada por la posguerra dejaban al desnudo la crisis de identidad y de valores de una cultura que parecía condenada inexorablemente a la autodestrucción.
Si bien Montse Watkins ha traducido al español las novelas arriba mencionadas, no disponemos aún de versiones en nuestra lengua del resto de los trabajos llevados a cabo por Osamu Dazai. Esta nueva traducción de un cuento corto titulado Esperando (Matsu, 1954) es apenas una colaboración a una tarea todavía por emprenderse.

"LECTURA E INFORMACIÒN EN LA SOCIEDADES DEL CONOCMIENTO Y LA TECNOLOGÌA" (Entrevista)





"LECTURA E INFORMACION EN LAS SOCIEDADES DEL CONOCIMIENTO, LA INFORMACIÒN Y LA TECNOLOGÌA" (Entrevista por Victoria Romero)
12 de julio de 2012 a la(s) 21:03
Lo que viene a continuaciòn, es una entrevista que me hizo mi hija Victoria con objeto de cubrir una tarea escolar en la Universidad. Al no lograr conseguir a quien entrevistar, me ofrecì yo. Lo cuàl me puso en aprietos. ¿porquè? No sabìa de que tema podrìa yo hablar ¿pintura, literatura o poesìa? se me hacìa muy vanidoso de mi parte. Por lo demàs, creo, acaso podrìa  atisbar algunas cosas interesantes en literatura o poesìa. Y, ciertamente,  eran temas no muy propios en la disciplina o carrera que està estudiando mi hija Victoria: ¡¡Relaciones Pùblicas!! uuuff.  Pues bien, logramos ponernos de acuerdo en el tema. Estructuramos la entrevista y la "ajustamos “para que la proporcionara al profesor de su asignatura en la Universidad. Al grabarla -fue inevitable- me excedì en los tiempos y, a veces- redundaba. La transcripciòn final de la presente entrevista fue corregida (para su publicaciòn en facebook) en lo que se refiere a la quinta pregunta y a las conclusiones. En èstas abordo (brevemente) lo que, a mi modo de ver, considero importante en la interpretaciòn de la lectura, en su sentido filosòfico u ontològico. Estoy cierto,  este tema requerirìa un trato aparte y más extenso. Ojalà,  en otra ocasiòn pueda escribir algo sobre el tema.
                                                        - ENTREVISTA-

A continuación, hablaremos sobre un tema importante para México: “Lectura e información en las sociedades del conocimiento y la tecnología”; tema que ha venido a ocupar una actualidad a raíz de la Encuesta Nacional de Lectura que se llevó a cabo en México en el año 2006. Encuesta en la que nuestro país ocupa uno de los últimos lugares dentro de los países que integran la OCDE: el índice promedio de lectura por habitante en México es de 2.9 libros por año. Por si fuera poco, también ocupamos, casi el último lugar en las evaluaciones PISA; examen que evalúa los conocimientos y competencias de los alumnos en condiciones simuladas de la vida ordinaria. Esto nos habla de que padecemos un gran rezago educativo en Educación Básica y Media superior. A partir de estas circunstancias, se han llevado a cabo, programas de la S.E.P., como también en los niveles de educación básica y media,  así como de instituciones públicas diversas, para impulsar la lectura dentro de la familia. Es ocioso comentar, el estado lamentable de la educación básica en nuestro país; misma que ha sido objeto de una investigación documental en la película “DE PANZASO” por el periodista Carlos Loret de Mola y Juan Carlos Rulfo.  De todos es sabido, la importancia y la presencia  que ha  adquirido en nuestras sociedades el desarrollo de los medios y tecnologías de comunicación digital, así como las redes de internet  por las que circula una inmensidad de información. Sin ésta sería difícil concebir el funcionamiento de toda sociedad en cualquiera de sus niveles.  .  ¿Pero qué tiene que ver todo esto, con las sociedades de la información, la tecnología y el conocimiento?  ¿Qué importancia tiene el acto de leer o la lectura propiamente dicha y qué relación tiene con el tema que abordaremos?

 Para abordar estos temas, me permití entrevistar al Sr. Justino Romero, a quien agradezco su disposiciòn para contestar las siguientes preguntas.

1.- Para empezar la entrevista; ¿me podría mencionar algunos  antecedentes  de lo que podríamos entender por “sociedades del conocimiento”?
Bien, “sociedades del conocimiento”, en tanto que sociedades orientadas al conocimiento. Siempre las ha existido desde el origen del hombre en estado gregario. La necesidad de aprehender y comprender el mundo, le ha permitido al hombre adquirir experiencias y conocimientos que compartirá a los miembros de su colectividad y demàs generaciones, mediante la tradición oral, visual o escrita. Pero, es en pleno siglo XX después de la 2ª guerra mundial que, con el inmenso desarrollo de las tecnologías de la comunicación, la información digital, y las redes de internet, se ha configurado lo que podríamos llamar, una “red o sociedad mundial de la información” cada vez más articulada e integrada por la mayoría de los países que integran el orden mundial.  A este intercambio cada vez más creciente y veloz  de la información,  le corresponde, paralelamente, en cierto modo,  el desarrollo de  “sociedades del conocimiento”. Sociedades orientadas a la inversión de porcentajes cada vez mayores  de su Producto Interno Bruto,  a la investigación y desarrollo científico. La noción de riqueza de una nación está cambiando. No solo los países con  reservas petroleras serán los más ricos, también aquellos que inviertan y generen más conocimientos y patentes; a éstos también se les ha denominado como “economías del conocimiento”. El perfil del orden mundial, se está modificando. La noción de “sociedad del conocimiento” fue utilizada por primera vez en 1969 por un universitario, Peter Drucker. También valdría la pena consultar el informe mundial de la UNESCO, del 2005. Creo, que podría aclarar muchas dudas al respecto. Por lo que se refiere a las políticas de educación que deben seguir los países miembros.


2.-  Bien, después de lo anterior ¿Podría explicarnos, qué importancia tiene la lectura  y que deberíamos entender por “sociedades de la información”?
                Antes que nada, hay  que precisar algunas cuestiones, por así decirlo, de orden antropológico. El hombre es un  creador de símbolos y el sistema simbólico por excelencia que ha creado: es el lenguaje. El lenguaje es un sistema de signos y significados convencionales que el hombre crea en sociedad, mediante el cual intenta explicar y comprenderse a sí mismo y a su propia realidad y así, poder intervenir y  actuar en ella. Por el lenguaje el ser humano se humaniza constantemente. Por medio del lenguaje (ya sea oral, visual o escrito) crea otras realidades independientes y significativas para él, hacen que el mundo sea más habitable. Ejemplos de sistemas simbólicos: las religiones, el arte, la ciencia, la política, la  historia, los mitos, la filosofía, etc.
 Pues bien, el hombre al crear el lenguaje escrito, crea la posibilidad de fijar en textos o libros  sus vivencias, conocimientos, experiencias, sueños, fantasías, pensamientos, etc., y acumular incesantemente, como un patrimonio creciente y perdurable como si fuera un memoria externa, con la cual le permitirà también un creciente innovación de la cultura y su transmisiòn a otras generaciones. En fin, todo esto que digo se acelera mucho con la invención de la imprenta en el siglo XV y abre la posibilidad de acceder a toda esta información  plasmada en libros o publicaciones a un mayor número de gente. Así las cosas, todas las sociedades generan información, valores y conocimientos acordes a la singularidad de cada sociedad. Y esta información es cada vez màs creciente e inmensaLas formas que se han dado cada sociedad para transmitir este caudal de conocimientos e información es: La educación. Pero la llave principal y básica de acceso a esta información y conocimientos es: La lectura. La lectura es el acto de leer  que realiza solitariamente el lector y el autor del libro, es un diálogo silencioso en que el lector, valora, jerarquiza y asimila los conocimientos y experiencias que le transmite el autor. También puede articular y estructurar estos conocimientos adquiridos e innovar creando otros conocimientos. Esta es una facultad creadora de la lectura.

3.- ¿Qué relación existe entre lectura y conocimiento y cómo relacionarlas con las  “Sociedades del conocimiento y la tecnología”?

Pues, como decía anteriormente. Todas las sociedades generan información y conocimientos y su principal preocupación es transmitir éstos, por medio de la educación y la lectura. Pero como todos sabemos: el aprendizaje es estrictamente individual. Si las sociedades no desarrollan capacidades lectoras en los individuos, difícilmente podrán transmitir su historia o memoria colectiva y, mucho menos, crear conocimientos y experiencias competitivas ante otras sociedades. Es claro, que no todas las sociedades tienen el mismo desarrollo científico y tecnológico. ¿Cómo explicar el desarrollo de las sociedades industriales del siglo XVII? ¿No fue la máquina de vapor un detonante de la Revolución Industrial? O más recientemente,  ¿cómo explicamos la  emergencia de países con alto desarrollo científico y tecnológico en pleno siglo XX,  en áreas como la energía nuclear, telecomunicaciones, informática, robótica, biotecnología y biología molecular, etc.? El conocimiento y la innovación tecnológica, tiene como fuente de desarrollo la investigación y creatividad del individuo en torno a los requerimientos, técnicos, científicos de su sociedad que le toca vivir.


4.- ¿De qué manera influye el desarrollo de las tecnologías de la comunicación digital; por ejemplo: las redes de internet y qué importancia desempeña en éstas, la lectura?
                Bueno, repetiré un poco de lo que dije anteriormente ¿Qué son las “sociedades del conocimiento y la información”? Pues bien. Poco después de terminar la 2ª guerra mundial, a mediados del siglo XX, inicia lo que se ha dado en llamar la 3ª. Revolución industrial que tiene como motores de desarrollo las economías que basan su crecimiento económico en una fuerte inversión en investigación y desarrollo científico y tecnológico: Informática y robótica, Telecomunicaciones en redes digitales, Biología molecular, Biotecnología, etc. Ya no serán solo los países poseedores de petróleo los que se definan como los más ricos, el concepto de riqueza cambiará. Hoy, en pleno siglo XXI, las economías en verdad pujantes serán aquellas que inviertan y estén a la vanguardia en el desarrollo de la investigación científica y tecnológica. Basta ver la importancia económica  de empresas como Nokia, Google, Microsoft, no solo en sus países sino también a nivel mundial. Esto nos habla de una dinámica, verdaderamente, cambiante en el orden mundial globalizador. Para todos es claro,  el auge inusitado de las tecnologías de comunicación: la telefonía celular y las telecomunicaciones digitales. Habrá  que imaginarse que sucederá (de hecho, ya està sucediento) cuando toda la información impresa que tenemos en archivos, bibliotecas, periódicos y revistas, se archiven en memorias digitales. Esto hará màs fácil y accesible su consulta  como también  el traslado e intercambio con otros países o sociedades. Lo que hace inmensamente sorprendente, es la velocidad y cantidad de información que circula por las redes digitales. Nuestras nociones de espacio-tiempo cambian radicalmente. Esto le da a nuestro mundo contemporáneo un perfil globalizador inusitado.

5.- ¿Piensa que  a las actuales redes de internet se les da el uso adecuado por los usuarios? ¿O hasta donde se ha convertido en otra forma más  de entretenimiento?
 Cualquier individuo  que ingrese a la red de internet,  puede darse cuenta de la inmensa  información de la cual dispone. Esto es una ventaja, pero también puede ser  una gran desventaja ¿Por qué? El disponer de una gran cantidad de información no asegura automáticamente, que este individuo pueda en verdad,  jerarquizar, discriminar y articular la información que recibe, y así,  crear conocimientos que le sirvan para enfrentar y tomar decisiones que le plantee la realidad. Es aquí donde el individuo si no cuenta con una capacidad lectora cada vez más competente  en el terreno de la investigación y el conocimiento, puede quedar al margen y “ahogarse” en la “inmensidad” de información y ser seducido o presa fácil por las gamas del entretenimiento que abundan en  las redes sociales. Aquì valdría la pena agregar, aquello que Mario Vargas Llosa ha escrito  en sus màs recientes reflexiones sobre la cultura y la civilización de la cuàl formamos parte en este siglo XXI: La banalización de la cultura y la civilización del espectáculo. Y, ciertamente, lel acto de leer no escapa a esta banalización de la cultura: ¿Què hacer ante una, cada vez màs creciente, sociedad en la que prevalece la diversión como valor supremo? ¿Què hacer ante la ausencia de jerarquías u homologación de nuestra cultura en la que, no hay diferencia entre un Montaigne, Joyce, Paz y un concierto de los Rolling Stones, Madonna, Michel Jordan o Brad Pitt? ¿Què hacer ante una erosión, cada vez mediática, del arte, la literatura, la política y el sexo, etc.? Estos temas y las reflexiones que nos aporta Vargas Llosa en su más reciente libro: “La civilización del espectáculo” son, por lo demás, imprescindibles para comprender la situación de nuestra cultura sino que también la circunstancias que enfrenta la lectura, es decir, el acto de leer y el sujeto que encarna ese acto: el individuo, en esta sociedad moderna. Por ùlitmo, dirè parafraseando unas palabras de Vargas Llosa en su “Breve discurso sobre la cultura” (2010): “…lo peor y lo mejor de la aventura humana pasa siempre por los libros –por supuesto, lo mejor de la literatura- y de que ellos ayudan  a vivir.” 

6.-  ¿Para cerrar esta entrevista, que nos puede decir a manera de conclusión?

Bueno, no sé si esto sea una conclusión o el inicio de otro tema que,  a mí en lo personal, me interesa y me gusta mucho dado que habla de la lectura no como herramienta instrumental o  capacidad desarrollada y compleja de leer textos escritos.; sino como una filosofía u ontología de la lectura  que, por supuesto, por razones de tiempo y espacio  sería tema de otra conversación. ¿Qué quiero decir con esto? Bien, retomaré unas líneas de pensamiento del poeta, escritor y ensayista mexicano Gabriel Zaid quien ha reflexionado profunda y extensamente sobre el tema de los libros y el carácter creador de la lectura.
En un principio dijimos que el hombre es un ser creador de símbolos por excelencia; es creador de sistemas simbólicos (arte, literatura, filosofía, instituciones, valores, ciencia, etc.)  plenos de sentido o significado, el hombre es un creador de lenguajes en constante evolución. Si, como decía Octavio Paz: “La cultura de una sociedad es casi ininteligible si se desconocen los significados de su lenguaje. La cultura no solo es material (cosas) e insititucional (estructuras sociales) sino que es signo (idea, concepto).”  Mucho de lo que el hombre ha creado es resultado de lecturas creativas  de su cultura, de una constante y continúa innovación creativa, de tal forma que haga más habitable la vida.  El hombre crea por la lectura, pero también se recrea a sì mismo. El hombre y la sociedad es fruto y se enriquece de ese imaginario social: El arte, literatura y, en especial, la poesía, son las formas màs altas de la creatividad humana. Es claro, que estas formas son resultado de lecturas creativas. Asì,  se entiende lo que decía Heidegger “el lenguaje es la morada del ser”, igual se podría decir: “leer es habitar la casa del ser”.  Hay un imperativo ètico y estètico: “la lectura hace màs habitable la vida” por la originalidad y por su creatividad. Ante la continua especialización de los conocimientos y saberes, Zaid nos sugiere un aliento convergente y unificador en nuestras lecturas, una apuesta por la cultura del saber libre e independiente en contraposición a la cultura del saber jerárquico y certificado. Termino con la siguiente cita: “Leer creativamente es tener el genio para descubrir nuevas modalidades del ser y de lo humano; trazar  nuevos caminos, hacer inteligibles nuevos territorios de la conciencia, la experiencia, la percepción: incrementar la vida y sus posibilidades”
              (“Gabriel Zaid, Lectura y conversación’", Humberto Beck)

viernes, 27 de mayo de 2011

LEONORA CARRINGTON: HECHICERA HECHIZADA

"La sinfonìa"


Recièn acaba de fallecer una gran pintora y escritora surrealista, que formò parte de esa generaciòn de pintores y escritores surrealistas de la primera mitad del siglo XX ( Tamayo, Remedios Varo, Soriano, Matta, Gerzso, Gironella, Lam, Buñuel, Breton, Pèret, Moro, etc). Movimiento artìstico que, màs que una escuela fuè un gran movimiento de espìritus creadores que, con sus obras dejaron una huella muy profunda en el arte de las siguientes generaciones. No deja de llamar la atenciòn que varios artìstas (como Carrington, Varo,Gironella, Buñuel) Mèxico haya sido su paìs de elecciòn, en el cual realizaron gran parte de su obra. La obra de Leonora Carrington despliega y extiende en su espacio pictòrico un universo pleno de magia y fantasìa, de apariciones y desapariciones, de encantamientos y hechizos, de un universo onìrico y lùdico, universo que solo podremos verlo si cerramos los ojos, si desplegamos nuestra mirada en libertad, mirada que solo se despliega cuando cerramos nuestros ojos y, solo asì, en verdad estàn abiertos o libres. Leonora con sus cuadros nos deja ver con su pintura y escultura un mundo maravilloso, pleno de significaciones. Con las obras de estos escritores y pintores surrealistas nos muestran algo que, como dirìa Octavio Paz en su " Poema Circulatorio" a propòsito de una exposiciòn "El Arte del Surrealismo", Mèxico 1973.

"el surrealismo/ NO ESTÀ AQUÌ/ allà afuera/al aire libre/ al teatro de los ojos libres/cuando lo cierras/ los abres/ no hay adentro ni afuera/ en el bosque de las prohibiciones/ lo maravilloso/ canta/ cògelo/ està al alcanze de tu mano/ es el momento en que el hombre/ es/(...)apariciòn del deseo/ deseo de la apariciòn/ no aquì no allà sino entre/ aqui/allà."

lunes, 18 de octubre de 2010

Vargas LLosa:"La literatura y el fuego: rebeldía irredenta"

Lo siguiente es una réplica a un comentario realizado por Ana María Parente en el post publicado por Ulysses: "El olivo Mario Vargas Llosa", sin embargo es también una celebración por el Nobel que acaba de obtener por su fidelidad y congruencia como escritor hacia la literatura y por consecuencia a la lengua española.

www.franciscomendez.blogspot.com
"EL ESCRITOR Y EL OLIVO"
No me queda la menor duda lo que para él, significa el papel del escritor o de aquellos que le antecedieron (en la tradición literararia de la cuál proviene), y por ello, me parece, define de una manera suscinta el papel que debe cumplir un escritor con sus escritos y ensayos. Sobre todo, la actitud libertaria ante todo aquello que coarte nuestra libertad. Un escritor es:

"“ciudadano universal, un ser sin fronteras que se adapta allí donde lo lleven. Pudo ser oriundo de la antigua Mesopotamia, pero todas las culturas tienen derecho a reclamarlo como suyo. El olivo es un ejemplo de versatilidad y don de gentes que las gentes deberían imitar”.

El comentario de Ana, me parece, es demasiado ligero o escrito con ligereza, pues, al parecer no lo ha leído o lo ha leído mal. Hay un libro que define la postura de Vargas Llosa : "Contra Viento y Marea", no recuerdo en que año se escribió. Pero también, su concepto de Neo-liberalismo (sic) ¿Qué es eso? Me gustaría que Ana se remitiera a algunas de las ultimás entrevistas que le han hecho a Vargas Llosa sobre el liberalismo. Y sí, efectivamente, Vargas Llosa es un liberal en la mejor tradición: Paz, Berlin, Russell, Raymond Aron, Popper, etc. Sus críticas a toda forma de poder que anule la libertad del individuo han sido del todo conocidas: Sus críticas a toda forma de totalitarismo (el soviético y su hijastro: el castrismo) hasta las formas de degradación del individuo por el imperialismo reinante. ¿Es necesario que me remita a sus úlitmos artículos sobre 'La banalización de la cultura'?



“La literatura y el fuego: rebeldía irredenta”

Ana: Nuestras lecturas del discurso al obtener el Rómulo Gallegos Vargas Llosa son radicalmente diferentes: Lo que para mí es una toma de postura de lo que significa el papel de la literatura y el escritor y, para nuestro caso, en Latinoamérica. ¿Es necesario recordar las circunstancias políticas a fines de los 60s de nuestros países latinoamericanos y la de nuestros escritores en esas regiones? Vargas Llosa ha sido fiel a los postulados que plantea en ese discurso

”…la literatura es fuego, que ella significa inconformismo y rebelión, que la razón del ser del escritor es la protesta, la contradicción y la crítica (…) Nuestra vocación ha hecho de nosotros, los escritores, los profesionales del descontento, los perturbadores conscientes o inconscientes de la sociedad, los rebeldes con causa, los insurrectos irredentos del mundo, los insoportables abogados del diablo.”

Pero también Vargas Llosa, ha sido riguroso en sus ensayos críticos de nuestro mundo contemporáneo y político: Véase sus ensayos recopilados en “Contra Viento y Marea”, ensayos escritos en la mejor tradición crítica, no solo de los liberales clásicos: Stuart Mill, A. Smith, D. Ricardo y los Founding Fathers ; sino también de nuestros liberales –también ya clásicos- contemporáneos: Isaiah Berlin, Russell, Octavio Paz, J. Françoise Revel, Popper y otros. Vargas Llosa, ha ejercido un espíritu autocrítico para consigo mismo: Muchos escritores latinoamericanos se fascinaron con la “Revolución Cubana”, pero no todos han ejercido autocrítica respecto de sus propias ideas políticas: García Márquez, Cortázar, y otros, por mencionar algunos sobresalientes. A principios de los 70s , varios escritores denunciaron la represión que padecían los cubanos y el carácter totalitario del régimen cubano a raíz de “ el caso Padilla”: O. Paz, Vargas Llosa, Plinio Apuleyo y media docena de intelectuales valiosos.
¿Es cuestionable la participación de Mario en la candidatura a la presidencia en Perú? No lo creo. Me parece, es otra forma de ver su integridad moral. Por el contrario habría que agradecer su compromiso cívico y político, al poner su integridad y preparación intelectual al servicio de aquello en lo que se cree. ¿Es necesario exigirle tener razón? Creo, hay que agradecer aquello a quienes se arriesgan en pública defensa de la razón que se cree tener. ¿Era necesario arriesgar su tranquilidad y cómoda reputación –bien ganada- de escritor a favor de sus conciudadanos? Se puede discutir su oferta política, no su congruencia y ejemplo para llevar en la práctica lo que él consideraba correcto. Baste el ejemplo de Fernando Savater en España. Así que, como dice Savater, Mario ha sabido demostrar cuando se dice “lengua sin manos, no eres de fiar”.
Por lo que se refiere a tus imprecisas ideas sobre liberalismo: Para mí el liberalismo no es una receta económica, es ante todo y tiene como valores o postulados básicos: el valor fundamental de la libertad, la propiedad privada y la tolerancia. Tiene como principal preocupación, las amenazas a la libertad social y la del individuo. Estas amenazas cambian con el tiempo. El liberalismo es un sistema de pensamiento crítico y humanista que proviene de la mejor tradición del humanismo liberal clásico del siglo XVIII, la izquierda al desligarse de la herencia humanista y crítica, y al no distinguir entre pensamiento liberal y conservador, preparó su camino al pensamiento totalitario y así, cavó su propia tumba. Pero para no extenderme más remito a los lectores a consultar, la mesa redonda “ El pensamiento liberal en la actualidad”, mesa que tuvo por participantes a Vargas Llosa, Savater y otros; celebrada el 4 de Noviembre de 2009 en Madrid. Se puede encontrar en la Revista de publicación mensual: Letras libres de España. Me parece, que con sus intervenciones disipa, con claridad, sus ideas en torno al liberalismo y a ese “concepto” sin ningún contenido semántico y sí, con bastante connotación peyorativa, con el que se ha querido denostar y hacer causante de todo los males. Concepto lleno de prejuicios ideológicos que, como consecuencia y secuela del derrumbe de las ideologías totalitarias se han arraigado profundamente: Neoliberalismo. ¿Quién, hoy en día, se autodenomina “neoliberal”?
Salud¡¡¡¡

domingo, 19 de abril de 2009

"Reflexiones sobre la muerte" (Comentario p/la radio)



Las preguntas y reflexiones acerca de la muerte, son tan antiguas como el hombre mismo. De igual manera, las respuestas que a lo largo de los siglos nos han dado las religiones y filosofías.
Los individuos al adquirir conciencia y certeza de nuestra muerte, como algo intransferible e ineluctable, revaloramos la filosofía de nuestra vida. Pues, ¿qué es la filosofía?: una continua interrogación acerca de la vida y sus aspectos cruciales --entre ellos, el de la muerte, es decir, el ya no estar más en esta vida. Así las cosas, gran parte de nuestros empeños: actos, obras, palabras, sueños, etc., tal vez sean, una forma de resistencia ante la muerte que nos es ineluctable.
Sin embargo, a pesar de saber que vamos a morir; que ya no vamos a estar más en este mundo, la muerte no ha perdido su carácter misterioso e inescrutable. Tal vez, sea por ello que la religión nos haya dado respuestas, acerca del "más allá de la muerte". Me pregunto: ¿Nuestras creencias religiosas siguen siendo un "alivio" o "consuelo" para nuestra muerte? Tal vez lo sean. Pero lo importante es, que valor y sentido le damos a nuestra vida, al dárselo se lo damos a nuestra muerte. Desde que nacemos, la muerte es la sombra que nunca nos abandona.
"Nuestra muerte ilumina nuestra vida. Si nuestra muerte carece de sentido, tampoco lo tuvo nuestra vida."
Octavio Paz "Laberinto de la soledad"
Es necesario dejarnos de atormentar o angustiar por la muerte en el sentido negativo: por el temor a perder los "goces de esta vida", por el temor a nunca más estar con aquellas personas amadas o por perder aquellas que nos arrebatará la muerte.
Así es que, pensar sobre la muerte es pensar sobre la vida: "dime como vives y te diré como mueres".

¿Cual es la vida que llevamos en estos tiempos modernos?
Vivimos la continua uniformidad y estandarización de nuestros hábitos y estilos de vida, estimulados con afanes cada vez más mercantilistas. Se nos impone un frívola preocupación por "patrones o estereotipos de belleza y salud", un "fetichismo del cuerpo" cada vez mas descarnado y despojado de erotismo; más bien cercano a una pornografía barata, sirva como ejemplo: "reality show", "Big Brother's", como formas de "voyeurismo colectivo", un "hedonismo y consumismo" cada vez más desenfrenado. Hoy como nunca, disponemos en el mercado de mayores "cosas y objetos" que consumir. ¿Tenemos tiempo para disfrutarlas? ¿Cuál es el sentido de la vida o los valores que nos ofrece la sociedad en que vivimos? Todo esto, tal vez; sea motivo para otra colaboración.
De antemano gracias al público radioescucha, por su tolerancia y su paciencia, para con estas líneas.

sábado, 7 de febrero de 2009

Rèplica a JAQUEMATE

"Angel de la melancolìa": Durero


OTRA VUELTA DE TUERCA: “FILOSOFÌA ¿TIENE CURA EL TEDIO?
(El comentario siguiente es una réplica al post publicado por JAQUEMATE)

Ulises, releo tu post y encuentro afirmaciones que no comparto:
“…y en lo que tiempo después se difundiría con un nombre tan vago como indefinible: la melancolía” ¡¿tan vago como indefinible?!
Aunque dignas de atención, acedia y melancolía se distinguen sutilmente del aburrimiento”




MELANCOLÌA: UN ARQUETIPO CULTURAL DE OCCIDENTE

A mi parecer, melancolía y tedio o aburrimiento son dos ideas totalmente diferentes; aunque parecieran tener algo en común. Querer “diluir” en el tedio una de las ideas arquetipo (la melancolía) más importantes a lo largo de la historia del pensamiento occidental; idea que ha influido y alimentado el imaginario colectivo (mitos y fantasías); así como la filosofía, psicología, poesía, arte y literatura desde la antigüedad hasta nuestros días. Obviar todo esto, es olvidar la diferencia abismal que existe entre ambas ideas o conceptos.
Baste revisar el diccionario de la R.A.L.E., para darse cuenta que melancolía y aburrimiento son dos ideas diferentes. En la palabra melancolía encuentro algunos elementos que no están en la palabra aburrimiento: tristeza, zozobra, nostalgia y un elemento que es determinante: manía o furor divino: la locura.


Aristóteles, retomando la teoría hipocrática de los humores, nos dice: “…todos aquellos que han alcanzado la eminencia en filosofía o poesía o la artes son claramente melancólicos, y algunos de ellos lo son tanto que son afectados por enfermedades causadas por la bilis negra” (Problema XXX, I de Aristóteles)


Robert Burton, citando un aforismo de Aristóteles decía: “nullum magnum ingenium sine mixtura dementia, no hay gran talento sin una mezcla de locura.” Así pues, una de las vertientes de la melancolía: genio y locura. Es así, que este arquetipo occidental juega un papel importante en pleno Renacimiento y es Marsilio Ficino quien revalora la melancolía como una disposición propia a la contemplación, al amor y a la poesía, reafirmando la doctrina astrológica y humoral. Por eso en el temperamento melancólico es determinante la bilis negra o el influjo de Saturno. Creo, que una de las obras que representan emblemáticamente al mundo renacentista y a la melancolía: “Ángel de la melancolía” de Durero.
Sobra decir, lo que significó la melancolía para el Romanticismo. Los románticos alemanes realizaron la primer gran crítica a ese gran movimiento de la Ilustración y la Revolución Industrial que han sido la encarnación de la fe en el Progreso y el Racionalismo; y, cuyos resultados, han sido las ciudades modernas que hoy día estamos viviendo.
EL MITO DEL “EDÈN SUBVERTIDO O EL BUEN SALVAJE
Uno de los grandes mitos que ha alimentado el Romanticismo: el mito del “buen salvaje” o el mito del “edén subvertido”. Hay una dualidad o ambivalencia en toda literatura que alimenta estos mitos: melancolía-metamorfosis; paraíso-utopía; tiempo original-tiempo histórico. Hay un intento de reconstruir (imaginariamente) a través del mito, un pasado rural mítico que se enfrente al horror real de la sociedad industrial.
¿No fue la Revolución Industrial, con sus ideas –hijas de la Ilustración- la gran subversión del mundo rural? ¿Cómo se da esta trasposición del “mito del edén subvertido” en nuestros países hispano-americanos? ¿Hay un choque trágico en nuestros países al enfrentar la modernidad industrial y el devastamiento de nuestro mundo rural?


“Y es que allá el tiempo es muy largo.
Juan Rulfo “Luvina”


¿Nos dice algo, ese universo melancólico que nos dibuja Rulfo en su “Pedro Páramo” y sus personajes de “Luvina”? No deja de ser sintomático, que la obra de Rulfo sea posterior a la primer gran Revolución en Latinoamérica que enfrenta y accede a la modernidad. ¿No es, acaso, la destilación a través de cuatro siglos en la lengua española, de ese arquetipo –la melancolía- , de la locura melancólica de ese gran personaje: El Quijote?


“…bajo el torbellino de la modernidad (…), yace un estrato mítico, un edén inundado con el que ya sólo podemos tener un relación melancólica; solo por vía de la nostalgia profunda podemos tener contacto con él y comunicarnos con los seres que la pueblan…” " La jaula de la melancolía" Roger Bartra p. 45


El tema es inmenso pero mi ignorancia, no lo es menos…ojalá estas líneas ayuden a disipar el malentendido entre melancolía y aburrimiento.
II
¿Una civilizaciòn del espectàculo?
En esta segunda parte me propongo abordar el tema del aburrimiento.
Si es legìtima la diversiòn o entretenimiento para escapar de rutinas deprimentes o embrutecedoras. Demasiado grave es, cuando en una sociedad en su tabla de valores, el entretenimiento o diversiòn se convierte en valor supremo. Ciertamente, a partir de la 2a. mitad del siglo XX, paìses democràticos y liberales de Europa y Amèrica del Norte; desarrrollaron una economìa de bienestar, un relajamiento en la moral sexual y tambièn un espacio, cada vez màs creciente, de ocio. Esto ha traìdo aparejado una industria del entretenimiento y la publicidad màs pujante y avasalladora. Pero tambièn -y, es lo màs grave- una banalizaciòn de la cultura y una frivolidad generalizada, asì como un periodismo irresponsable que se alimenta del chisme y el escàndalo. Asì las cosas; ¿habremos de conformarnos con una cultura del espectàculo de "superficie y oropel" que se nos ofrece como diversiòn?
"La literatura light, como el cine light y el arte light, da la impresiòn còmoda al lector, y al espectador, de ser culto, revolucionario, moderno, y de estar a la vanguardia, con el mìnimo de esfuerzo intelectual. De este modo, esa cultura que se pretende avanzada y rupturista, en verdad propaga el conformismo a travès de sus manifestaciones peores: la complacencia y autosatisfacciòn." "La civilizaciòn del espectàculo" Vargas Llosa Revista Letras libres No. 122
¿Estamos condenados a la cultura kitsch? Aquella que "pone sus miras en lo agradable, sin atender los mejor" ¿Què es lo mejor? ¿Què hacer para que nuestra vida adquiera sentido, dignidad y trascendencia ante nuestros ojos?
Les comento una anècdota que cuenta Rob Riemen sobre el poeta Joseph Brodsky, ganador del Nobel, quièn pudo escapar del totalitarismo soviètico y marchò hacia el exilio en E.U.A.; se sintiò profundamente conmocionado al ver lo que el mundo libre hacìa con su libertad. Brodsky hizo la siguiente observaciòn:
"Peor que la censura, incluso peor que la quema de libros, es la negligencia hacia la literatura, el no leer literatura. No se trata del destino del ser humano. La poesìa, el lenguaje de la literatura, es el ùnico instrumento que tenemos para comprender y comunicar nuestras experiencias y emociones màs profundas. Sin este lenguaje, las personas ya no podràn comunicar lo que yace en lo profundo de su ser. El ùnico lenguaje que nos queda es el lenguaje corporal, que es por definiciòn violento."
¿Què hacer ante una sociedad que considera que la diferencia entre Madonna y Mozart es una cuestiòn de gusto? Sòcrates nos recuerda: "una vida sin exàmen no vale la pena ser vivida" Pues, de eso se trata. Plantearse preguntas importantes: ¿Còmo debemos vivir?
Salud!!!

miércoles, 19 de noviembre de 2008

"SOLEDADES...DE BABEL O DIALÈCTICA DE LA SOLEDAD: SOLEDAD Y OTREDAD"



IN MEMORIAM: Para Octavio Paz en su aniversario luctuoso.



Las líneas que a continuación escribo, son un comentario sesgado, en torno a la soledad y que, como pretexto de la lectura de un poema de Benedetti: “Soledades”, me permito contraponer mi lectura que, en torno a la poética de la soledad, Octavio Paz nos ha aportado. Tal vez, sea ocioso mencionar dos de sus grandes obras: un ensayo de poética histórica: “Laberinto de la Soledad” y un gran poema: “Piedra de Sol”. Quienes estèn interesados en leer los poemas aludidos en estas líneas; no les será difícil encontrarlos en Google. No està por demás advertirles que no pretendo, ni con mucho, un análisis de los poemas en cuestión. Es, sobre todo, un comentario sesgado en torno a la soledad.



“Nuestra condición humana es: nacer solos y morir solos”
Octavio Paz

I


La soledad siempre ha sido uno de los temas centrales en la poesía y, no lo es menos, en la poesía en lengua española. Su sentido poético ha cambiado a lo largo de la historia. La soledad, concebida como retiro y apartamiento de la turbulencia de las ciudades, para regocijo y plenitud del espíritu en la paz y quietud del campo. (Góngora, Lope de Vega), pero también existe la soledad del místico, que es una forma de abandono y comunión con esa otra realidad: lo sagrado y lo divino (San Juan de la Cruz); la soledad como forma de abismarse en sí mismo, como forma de autoconocimiento: “las aguas del abismo/ donde me enamoraba de mí mismo” (Quevedo). Y a partir del siglo XIX con ese gran movimiento de rebelión romántico: Nietzsche, Marx, Freud y, en especial, los poetas “malditos o demoníacos”: Hölderlin, Novalis, Baudelaire, etc., la soledad se asume como conciencia de la angustia, fruto del desamparo y desesperanza del hombre moderno; como conciencia de la escisión del hombre y sus creaciones; como búsqueda de unidad entre conciencia e inocencia; como nostalgia de un ‘estado perdido’ en el que el hombre era uno con el mundo y sus creaciones.
Ya en pleno siglo XX, Antonio Machado, poeta, escritor y filósofo, atisbó acerca de los problemas fundamentales de nuestro tiempo y de la poesía. Concebía a la soledad como búsqueda de ‘otredad’, como sed de alteridad. Machado, nos dice, que “el hombre es: esencial heterogeneidad del ser”. El hombre y su soledad solo adquiere sentido en relación a los ‘otros’. El hombre en su soledad es búsqueda de trascendencia, el yo adquiere sentido en el tú, el ser es avidez de ser lo que ‘el no es’. La radical alteridad del hombre es la mujer. Antonio Machado nos proporciona en su “Juan de Mairena” una dialéctica de la soledad.
Antes de seguir con estos comentarios, quisiera abordar el poema de Benedetti.
II


¿Desde que tradición poética nos habla el poeta en su poema “Soledades”? Es claro, que el poeta no puede eludir o abordar el tema de la soledad sin considerar lo que nos han dicho otros poetas. ¿Qué nos aporta o revela el poema para la comprensión de la soledad del hombre en estos tiempos modernos? Si algo nos aporta la poesía, es el revelarnos aspectos vitales de nuestra condición humana; el proporcionarnos una visión con la cual se nos haga más habitable y comprensible el mundo. Es a través de la palabra, que se nos revela el sentido profundo y misterioso del mundo.
¿Qué nos quiere decir el poeta, cuando dice: Ellos tienen razón/ esa felicidad/ al menos con mayúscula/ no existe”? ¿Se refiere a todos aquellos poetas que cuestionaron y nunca creyeron en profetas y proveedores de geometrías políticas? ¿Se refiere a todos aquellos que siempre rechazaron a totalitarios y autoritarios de todo tipo: comunistas, fascistas, burócratas, misioneros, terroristas, revolucionarios y todos los demás déspotas, igualadores y sistematizadores o proveedores de ‘Felicidad organizada’? Si es así. Comprendo sus desilusión y desencanto ante el fracaso de las utopías políticas del siglo XX como formas de “comunión absoluta”; como formas de “salvación del individuo” en proyectos “utópicos y revolucionarios”; teniendo como horizonte una promisoria y “nueva sociedad”.
Así las cosas, la felicidad (con minúscula) será una consecuencia, así sea breve o instantánea, de los estados de plenitud (amor, alegría, etc.) Lo inverso, también es válido. Los estados de plenitud: amor alegría –formas de encuentro con los otros-, al igual que la soledad, son formas de felicidad. Al final del poema, no es extraño que el personaje del poema se pregunte: ¿y después de la soledad? y, a su vez, ponga esa pregunta en el lector del poema.
Será necesario acudir a otro poema del mismo autor para comprender lo que nos quiere decir el poeta: “Soledades de Babel”. Creo que el poema es mejor –al menos para mí- al de “Soledades”, que lo encuentro o percibo muy mediocre y con excesos de prosaísmo.
“Soledades de Babel” logra decirnos o mostrarnos la visión del poeta con más claridad sobre el tema de la soledad en las ciudades modernas de nuestro mundo contemporáneo. La parábola bíblica no podría ser mejor, para hacernos comprender su visión. Es más, con este poema se hace más comprensible su poema “Soledades”. No comparto su relativismo de solitarios, de solitarios que se saben solos, de individuos que son presos de su propia soledad; presos en su ‘torre de Babel’; presos en su lengua de solitarios. El poeta o el personaje del poema ¿es el mismo? No logra escapar a la dicotomía o contradicción entre comunión y soledad, que forma parte de otra serie de dualidades: individuo y sociedad, pasión y conocimiento, poesía e historia, canto y reflexión, amor y erotismo, etc. Cierto, el fenómeno de la soledad en las ciudades modernas es un hecho indiscutible. La ciudad se ha convertido, a partir de la segunda mitad del siglo XX, en uno de los grandes temas de la poesía y ha sido tema de grandes poetas: Cernuda, García Lorca, Xavier Villaurrutia, Octavio Paz, Eugenio Montejo, T.S. Eliot, y un largo etc.
“Soledades de Babel” nos muestra una ciudad habitada por solitarios que se saben solos, que están presos en su propio laberinto de la soledad, pero… ¿Cuál es nuestro hilo de Ariadna?

Así/ diseminados pero juntos
Cercanos pero ajenos/solos codo con codo
Cada una en su burbuja/ insolidarios
Envejecen mezquinos como islotes

III

“Hay que saber estar solo para saber estar con los demás”
Octavio Paz



Antonio Machado, pero sobretodo, Octavio Paz ( con su poética de la ciudad); nos han proporcionado una respuesta diferente a uno de los problemas cruciales de la poesía contemporánea. Esto nos ha permitido pensar con más claridad el tema de la soledad en las ciudades moderna de nuestro siglo XX a la fecha. Si partimos del hecho de que soledad y comunión son formas vitales de estar en el mundo para el individuo. Con Machado, la soledad solo adquiere sentido con la otredad, con la búsqueda esencial de alteridad: con la búsqueda y encuentro con los otros. La soledad, como conciencia de soledad, presupone a los otros como conciencia de la separación y desligamiento del yo con respecto al tú, de un yo cercenado de un nosotros. No existe soledad pura; toda soledad presupone la alteridad u otredad.

“El conocimiento de nosotros mismos se manifiesta como un sabernos solos; entre el mundo y nosotros se abre una impalpable, transparente muralla: la de nuestra conciencia.”
“Laberinto de la Soledad” Octavio Paz
Octavio Paz, heredero de tradiciones poéticas diversas: como la barroca (Quevedo, Lope de Vega, Góngora); la romántica (Novalis, Baudelaire) y de la poesía modernista, así como del pensamiento de Machado, Paz escribe un poema: “Piedra de Sol”, que es uno de los grandes poemas del siglo XX que se hayan escrito en lengua española; comparable a otro gran poema “The Waste Land” de T.S. Eliot. En ese poema, aborda el tema de la soledad de tal forma que, no se puede escribir sobre el tema de la soledad y la ciudad, sin considerar el gran aporte de este poema. Poema en el que se alía canto y reflexión, poesía y conocimiento, poesía e historia de una manera excepcional.

“los otros todos que nosotros somos…
Los otros que no son si yo no existo,
Los otros que me dan plena existencia.”
(…)

Ten un rostro
Para mirar mi rostro y que te mire,
Para mirar la vida hasta la muerte.
“Piedra de Sol”
Octavio Paz


“El hombre soledad, el hombre comunión, el hombre amor, el hombre desesperanza, el hombre libertad, se expresan en la palabra y no es que la palabra se reduzca a una mera expresión de lo que el hombre piensa o siente, sino que es, por definición, la esencia misma que lo constituye. Hombre equivale a palabra, a lenguaje, a poema.”
“Poesía y conocimiento” Ramón Xirau

Bueno, hasta aquí termina lo que no dejar ser un pequeño acercamiento al tema de la soledad y a la poética de Octavio Paz. La poesía de Paz es muy vasta y sus horizontes rebasan mi capacidad. Pero, queden pues, éstas líneas como testimonio de mi admiración a este gran poeta.
Salud!!!!